
Las denuncias efectuadas por vecinos y trabajadores impidieron que un grupo de personas ocupara de forma ilegal el edificio que albergó al restaurante Mariskonea de Punta del Este.
El Municipio de Punta del Este advirtió a la policía de la intención de varios de okupas de penetrar el edificio. El hecho ocurrió a primera hora de la víspera cuando un trabajador circulaba en su moto por la calle 26 y advirtió como varias personas ingresaban al complejo, hoy en estado de abandono. De inmediato dio aviso de la situación en el propio municipio ubicado a unas tres cuadras.
El caso también fue denunciado por varios vecinos quienes observaron a los sujetos cuando pretendían entrar a la construcción. “Por suerte impedimos que esta gente entrara en el edificio”, dijo el alcalde Martin Laventure. El jerarca sostuvo que el edificio es propiedad de una sociedad anónima y cuenta con un sereno que cuida el lugar en determinado horario de cada jornada.
En efecto, el lugar fue comprado años atrás por la empresa Fibamar Sociedad Anónima, propiedad del empresario uruguayo Walter “Coco” Zeinal. La empresa pidió a la administración del entonces intendente Enrique Antía construir un hotel de lujo de quince pisos. El pedido fue denegado. La misma respuesta fue dada luego por el intendente Óscar de los Santos.
Abandonado
En el año 2013 De los Santos firmó una resolución por la cual la firma Fibamar SA fue autorizada a demoler el viejo local de Mariskonea. En esta ocasión el permiso concedido autorizó la demolición de hasta 912 metros cuadrados.
El predio tiene una superficie total de 1650 metros cuadrados y presenta un notorio estado de abandono. Por lo demás, el vivero construido por los propietarios del restaurante, que tiene conexión con el mar por debajo de la rambla de circunvalación de la península, está lleno de agua.
Bien por lo vecinos,
Somos nosotros mismos los que tenemos que cuidarnos entre todos.