El juez penal de 4º turno, Sebastián Amor, condenó en la tarde de este miércoles a los cuatro jóvenes que en la tarde del pasado sábado 5 de febrero agredieron a otro joven al que confundieron con un ladrón.
Uno de los imputados, B.D.R.R. fue condenado como autor de un delito de violencia privada agravada en reiteración real con un delito de lesiones personales a la pena de doce meses de prisión bajo el régimen de libertad a prueba.
En la misma audiencia, los otros tres involucrados en el caso, R.A.C.F., F.L.F. y F.O.G. fueron condenados como coautores de un delito de violencia privada agravada en reiteración real con un delito de lesiones personales a la pena de diez meses de prisión que también se cumplirán bajo el régimen de libertad a prueba.
Las penas aplicadas a los cuatro jóvenes fueron las siguientes: obligación de fijar domicilio, de presentarse una vez por semana en la seccional policial de su domicilio, de realizar un tratamiento psicológico orientado al manejo de la ira, y por el plazo de diez meses deberá realizar servicios comunitarios.
El caso fue cerrado a partir del acuerdo alcanzado entre la fiscalía y la defensa de los cuatro involucrados mediante la modalidad del proceso abreviado.
El hecho
El incidente ocurrió el 5 de febrero a las 20:30 horas en la calle Polux y Camino a la Laguna, en el barrio Pinares de la capital departamental cuando la víctima salió a dar una vuelta por la zona y fue confundido con un ladrón por sus vecinos.
Luego de sucedida la agresión su padre, Pablo Romero García, profesor de Filosofía y docente de Ética en la Universidad Claeh y asesor del Consejo de Formación en Educación de la ANEP, contó en una carta que sus vecinos golpearon, atropellaron y amenazaron con matar a uno de sus hijos, de 18 años, tras suponer que era un ladrón porque llevaba una gorra con visera. Posteriormente la familia del joven formuló la denuncia correspondiente que este miércoles terminó con la mencionada condena.