
Los supermercados de Punta del Este esperan para la próxima temporada una caída del veinte por ciento en las ventas, respecto del verano 2019/2020, esto es antes que estallara la pandemia de coronavirus en nuestro país, el viernes 13 de marzo de 2020.
El dato fue aportado por Daniel Menéndez, gerente general de la Asociación de Supermercados del Uruguay. La caída, si bien es significativa, es menor a la registrada en el verano inmediato anterior, temporada 2020/2021, cuando cayó un cuarenta por ciento respecto del 2019/2020.
“La temporada del verano pasado fue muy mala, me refiero al 2020/2021 cuando la caída de las ventas cayó casi un cuarenta por ciento abajo respecto de antes de la pandemia. Para esta temporada de inminente inicio esperamos más, pero calculamos que será un veinte por ciento debajo de la prepandemia, la que, además, no fue buena”, indicó Menéndez a Correo de Punta del Este.
“Ni cerca de esperar a aquellos niveles que Punta del Este nos tenía acostumbrados hace muchos veranos. De todas formas, las empresas hicieron y están haciendo un gran sacrificio para brindar el mejor servicio. Y lo que es fundamental no ajustaron los números por la vía del seguro de paro y del despido de sus funcionarios.”, añadió Menéndez.
Reconocimiento a los trabajadores
Por otra parte, el ejecutivo recordó que los trabajadores de los supermercados hicieron un gran esfuerzo porque desde el primer momento enfrentaron la pandemia desde sus lugares de trabajo mientras el resto de las actividades se fueron a la cuarentena. “Es gracias a los empleados de los supermercados que la cadena de venta de alimentos y de otros bienes jamás se cortó desde que la pandemia impactó en el Uruguay. “Los empleados pusieron la cara a las más de trescientas mil personas que todos los días ingresan a los supermercados de todo el país”, recordó.
Menéndez recordó que la actividad de los supermercados trepó mucho en los primeros tres meses de la pandemia cuando las familias se volcaron a las grandes superficies para poder adquirir productos y alimentos de todo tipo. “En esa época el desconocimiento de lo que podía pasar era muy grande por lo que se produjo un fuerte movimiento de compras”; indicó.
Esto a los tres meses fue historia, por lo que los supermercados comenzaron a sufrir una caída en el nivel de ventas. “En esos primeros meses pudimos parar la caída, pero duró poco. A los pocos días se retomó la caída en las ventas”, agregó.
Menéndez explicó que los supermercados instrumentaron fuertes políticas de ajuste para poder enfrentar semejante caída en el nivel de ventas. “No se cubrieron puestos con personal que era enviado desde Montevideo, y otras medidas de contención de gastos que nunca pasaron por despidos o envíos al seguro de paro”, indicó.
También explicó que las protestas por el remarque de precios en las grandes superficies son formuladas por personas que no conocen el negocio de los supermercados. “No es un tema del supermercadismo, es un tema del negocio de retail que está instalado en una zona balnearia donde en dos meses del año hay dos millones de personas y el resto del año no. Sin embargo, el alquiler hay que pagarlo todo el año, la luz y otros insumos que hacen al negocio de los supermercados. Idem, salarios e impuestos en un negocio que factura dos de los doce meses del año”, expresó. “No es un tema nuestro, no es un tema de precios, es un tema de costos, de cuánto cuesta tener un local de la zona turística”, expresó.
Canasta turística
Menéndez adelantó que de común acuerdo con las autoridades del Ministerio de Economía y Finanzas y del Ministerio de Turismo, los supermercados de las zonas turísticas implementarán la denominada “canasta turística”.
En el mismo sentido, los supermercados desistieron de solicitar al Ministerio de Economía y Finanzas de conceder a las rotiserías de estos el régimen de impuestos que existe para los establecimientos gastronómicos de la zona turística del país. “Es una batalla perdida, no la damos más porque no hemos tenido los suficientes argumentos para hacer entender a los gobernantes que la comida elaborada en un supermercado es igual a la elaborada en otro lugar. Que nos correspondería acceder al descuento del IVA como existe para cualquier restaurante”, enfatizó.