
La temperatura no lo revela, pero hace ya largo rato que ha comenzado un largo y penoso invierno en lo que a materia económica se refiere. Según es sabido, las últimas temporadas no han sido redituables como para mantener la atmósfera de prosperidad hasta la siguiente primavera y ahora se suma, cada vez más, el parate en la industria de la construcción lo que, a su vez, deja sumidos en la parálisis a una enorme cantidad de rubros. No solo en el rubro barraca y ferretería sino también en el área de los proveedores de servicios varios y en quienes suministran muebles y enseres para alhajar las nuevas viviendas. Todo a causa del famoso “cepo cambiario” que rige desde hace 42 meses en la Argentina y ha afectado severamente el mercado inmobiliario y la construcción a ambas márgenes del Plata.
La penuria local se hace notar, ya de manera preocupante en el distrito de diseño de Punta del Este, ubicado principalmente en torno a la oblicua avenida Italia, que une la parada 4 con la 3. El titular de uno de los elegantes comercios que funcionan en ese sector, dijo ayer al informativo de Radio Maldonado que la actividad está muy afectada en esa área.
“La situación que nosotros estamos vislumbrando -ya comenzó el año pasado y ahora se va a profundizar- es una baja importante en todo lo que es trabajo comercial, todo lo que es el rubro empresarial de Punta del Este que tiene que ver directamente con el turismo”, indicó el comerciante.
“Desde ya que la construcción es uno de los que yo pienso que va a manifestarse antes que todo por el problema de que lo que se estaba construyendo y se estaba terminando se terminó. Ya quedan grupos de gente sin trabajo y no hay grandes y nuevos emprendimientos que hayan comenzado o que comiencen a corto plazo que den nuevas fuentes de trabajo para contratación directa de mano de obra y para todo lo que maneja el mercado de la construcción, que son los subcontratos”, señaló.
Se siente
El empresario, que también trabaja en hotelería y gastronomía, aseguró que el parate “ya se siente” incluso en rubros como la electricidad y la sanitaria. “Nosotros estamos con un local de iluminación; le vendemos a edificios y los electricistas trabajan con nosotros y ahí ya se nota la baja enorme de la ocupación de todo lo que es el rubro estrictamente para las empresas constructoras y empresarios que tienen que ver con ese rubro”, indicó.
“En cuanto a lo comercial estamos exactamente igual, pese a que es otra cara de la moneda, porque es el turismo que viene y que no tiene que ver con la construcción y que no es el comprador final de un apartamento, pero es el que viene a un hotel, el que viene a alquilar una vivienda y el que viene a un restaurante a consumir. Y en ese mercado hay una baja muy importante. Ya la temporada se manifestó prematuramente mal porque las tarifas con las que tuvimos que trabajar los hoteleros fueron muchísimo menores”, explicó.
“En el rubro gastronomía se pudo sobrellevar la situación bastante favorablemente gracias a las promociones de las tarjetas de crédito, que fueron realmente sustanciales a la hora de capturar el consumo del cliente, porque favorecía el descuento que el gobierno concedió en las tarjetas para todos los turistas extranjeros que compraban y, además, había promociones puntuales de 25 a 30% en casi todos los restaurantes, con todas las tarjetas. Eso agilizó una temporada que fue dura, pero que dentro de todo se pudo sobrellevar con bajas de tarifas hoteleras y con promociones en los restaurantes”, señaló.
En caída
En cambio, el empresario dijo que ahora se vive “un invierno duro” a pesar de que el clima “nos va favoreciendo”. “Se ve la falta de gente”, exceptuando los fines de semana largos, “la situación es de bajo consumo” lo que perjudica a todos los niveles de la hotelería y sus “tarifas irrisorias” de hoy en día.
Por otra parte, el empresario sostuvo que últimamente se viene notando cada año “una caída de entre un 15 y un 20%” de rentabilidad “para casi todas las actividades”. “O desciende por un tema de baja de precio, de tarifa o de promociones o desciende por baja de usuarios o de consumo para el rubro que uno tiene”, sentenció.
“Esa es una constante en lo que es venta de productos alimenticios, restaurantes, hotelería, servicios o ventas finales equipamientos y otros rubros que se venden al público”, señaló. El empresario dijo que esto se constata al hablar con comerciantes de todos los rubros que trabajan en la zona. “Todos estamos luchando por mantener la facturación a base de promociones, que significan bajar la rentabilidad que uno tenía en el producto”, aseguró.
Por lo demás, comentó que la situación es “piramidal”, lo que explica la gran cantidad de locales vacíos que se ven en la zona. “Si no hay trabajo, no hay facturación, si hay pérdidas, hay caída de puestos de trabajo, se empieza a frenar la actividad y empiezan los seguros de paro, los despidos de ejecutivos, se escucha que la gente tiene remuneraciones mixtas -sueldo básico bajo y comisión”, como ocurre con los mozos que “trabajan con propinas” y solo los fines de semana.
Asimismo, dijo que se ha visto el cierre de muchos establecimientos en áreas comerciales como La Barra, la calle 20, la avenida Roosevelt y diversas zonas de Maldonado. “Hay ofertas de locales comerciales en todos lados que antes estaban ocupados”, añadió.
Ningún argentino puede sacar dólares fuera de su país. Ni siquiera las multinacionales. Los desarrolladores argentinos que tenían dinero guardado en EEUU lo invirtieron a granel en Miami para aprovechar un enorme mercado de compradores. En Punta del Este siempre se construyó pensando en el mercado argentino y eso ya no es posible ni lo será mientras Argentina tenga un gobierno que no genera confianza.
Los países latinoamericanos no podían no firmar los tratados de intercambio de información tributaria. Todos lo hicieron. Ni siquiera Suiza pudo sustraerse al mandato de la comunidad internacional y ahora esta obligada a levantar el secreto bancario cuando un país se lo pide ¿Quedó claro?
Concuerdo en todo con Mario. El tratado fue funesto
En la nota:¿Comerciantes esteños capean una larga y penosa baja temporada – See more at: http://www.correopuntadeleste“, se desliza un error:no es el cepo(en argentina) lo que puso al freno a la construccion y su repercusión en actividades relacionadas, sino el Tratado de intercambio de informacion entre Argentina y Uruguay (Y esperemos que no venga otro peor porque directamente desaparece Punta);la prueba, aparte de lo que uno sabe por charlas con conocidos,es que entre los años 2013/2014 Argentinos inviertieron por valor de U$s 2.000.000.000(si dos mil millones) millones de dolares en inmueble en Maiami;no se engañen, este es el problema, y repito, esperemos que el tratado quede como esta hoy que ya bastante daño hace.-