
El próximo lunes 13 y el martes 14 de agosto, en el local que ocupa la sucursal de la Agencia Nacional de Vivienda, calle Solís casi Bergalli, se llevarán a cabo remates de viviendas de El Cortijo, un complejo habitacional ubicado al norte de la ciudad. A juicio de quienes habían adquirido y pagado las viviendas de ese barrio, el hecho constituye una injusticia que no tiene en cuenta su situación ni el dinero que ya habían pagado a la empresa constructora hace ya varios años.
Esos vecinos emitieron un parte y una proclama señalando que en el remate “estarán todos los interesados convocados a través de la publicación del edicto respectivo” y que “antes de su lectura por el rematador, se procederá en cada acto, a poner en conocimiento de todos los presentes, los hechos que motivaron los remates”.
La subasta tiene una larga historia, recordaron. Las viviendas que pasarán bajo el martillo están ocupadas por los titulares de una promesa de enajenación de inmuebles a plazo celebrada con la empresa Nelori SA, con el respaldo y financiamiento del Banco Hipotecario del Uruguay (BHU).
En el año 2006 Nelori SA fue embargada, lo que recayó sobre los terrenos del Barrio El Cortijo, correspondientes a los padrones 20882 a 20886.
“El BHU, sin distinguir que quien incumplió fue la constructora, pasó el paquete a la ANV, que hoy desconoce que se le pagó la totalidad a Nelori SA, y todo lo abonado al BHU”. Por el embargo, dijeron, los recibos de pago no se emitieron “a nombre del comprador, sino al de la constructora embargada”.
“Un largo camino”
“Desde el año 2006 y hasta hoy día inclusive, ni el BHU ni la ANV han podido lograr la vocación para transmitirnos el dominio saneado, esto nos lleva a que para que el Estado pueda regular la situación, la vía sea la escrituración judicial o el remate”, señalaron los vecinos.
“Esta es la realidad para cualquiera que no habitando la vivienda pretenda tomar posesión de ella, un largo camino, que deberá, luego del remate, enfrentar un juicio de entrega de la cosa y una causa en curso, iniciada por los compradores contra Nelori SA, el BHU y la ANV”, indicaron.
“Seguimos avanzando en vía civil, evaluando las responsabilidades penales que corresponden por la maniobra de estafa de la que fuimos víctimas. Al accionamiento trasladaremos todos los costos económicos extraordinarios que está significando para nosotros conservar nuestras viviendas. Y, se agregará como prueba, lo que en el día del remate documentamos, desestimando la calidad de tercero adquirente de buena fe de cualquier interesado frente a los derechos de los titulares de la promesa de compraventa de la vivienda que se remata”, agregaron.
Los vecinos también advirtieron que “quien puje un precio debe saber que no habrá entrega inmediata y todos los vecinos ayudaremos en la remoción de todas las mejoras que le otorgan valor agregado a la vivienda. Un tercero sólo recibirá la vivienda tipo con una pérgola de madera. No incluye: instalaciones de desagüe, cercos, muros, garajes, barbacoas, anexos, etc. El escribano dará fe, además de la presente exposición finalizada, del acto del remate y desarrollo hasta su conclusión”, concluyó el mensaje.