
Hace unos 25 años que se generalizó el uso del teléfono celular, pero la instalación de las antenas que hacen posible la comunicación sigue generando resquemores -a veces casi- como el primer día: nadie quiere en las inmediaciones de su casa una torre que un buen día podría desplomarse.
Ahora la protesta se hace sentir desde Altos del Pinar, cuyos vecinos lamentan la colocación de uno de esos armatostes de Ancel y reclaman su remoción. Un vocero de la movilización vecinal, Pablo Piacenti, dijo este lunes a FM Gente que la zona está densamente poblada y que allí rigen estrictas reglas de edificación. Además, explicó que la antena se colocó el pasado viernes, en vísperas de un feriado largo, presuntamente gracias a un permiso otorgado por la pasada administración municipal. El lunes y el martes la IDM no estuvo abierta de modo que fue imposible corroborar la información.
A todo esto, los Vecinos de Altos del Pinar hicieron llegar una carta a FM Gente. Allí manifestaron su “malestar e indignación, por la instalación de una antena de comunicaciones de 30 metros aproximadamente de altura y de gran diámetro en un terreno privado en las calles los Lirios y los Alelíes. No nos queda claro cómo se permite la autorización de esta construcción por los organismos públicos en un barrio Jardín, donde la reglamentación municipal es muy clara y no permite alturas superiores a los 7 metros (PB+PA)”, indicaron.
“Los daños que genera a nuestro barrio son múltiples, desde la desvalorización de la propiedad, hasta el daño visual y a la salud. Entendemos y creemos que se trata de un error y que los organismos públicos van a actuar con la debida diligencia para el retiro inmediato de esta antena y que esta situación sea solo una anécdota para los vecinos. Evitando que se realicen gastos innecesarios en la defensa de nuestros derechos”, remarcaron.
Permiso
Piacenti dijo a la emisora que “no hay un conocimiento claro de las autoridades departamentales en cuanto a la autorización” Señaló que, por los contactos mantenidos, se pudo saber que, aparentemente, habría “un permiso” otorgado hace unos cuatro años, durante el anterior gobierno comunal.
“Estamos en un barrio jardín. Es un lugar altamente poblado. Y al lado, prácticamente de la antena, tenemos un Caif. Tenemos muy cerca al colegio Pinares del Este. El barrio B 9 está enfrente, a una cuadra de la antena. Y si bien hay dos bibliotecas respecto al daño que pueden provocar estos artefactos a la salud, no lo queremos. En países desarrollados, se han retirado de los centros poblados”, afirmó.
Además, dijo que los vecinos tienen severas restricciones en cuando las edificaciones. Por lo que no se entiende la colocación de esta antena, que “es una mole de cemento”.
Dijo que se está tratando de “recabar toda la información posible”, con el fin de que esta antena sea relocalizada “en otro lugar, donde no haya gente, y donde no haya niños”. Agregó que se preveía que la antena empezara a funcionar hoy. “Pero yo pasé temprano por allí y estaba todo muy quieto. No estaba funcionado”, explicó.
Por otra parte, el vocero sostuvo que en estos días se espera contar con información “de primera mano” de parte de la IDM y de Antel para definir “las acciones a seguir”.
Foto: FM Gente