Tres escribanos y varios individuos fueron denunciados en los últimos meses por la ocupación ilegal de centenares de predios ubicados en las zonas costeras de los departamentos de Canelones y Maldonado. En algunos casos, hay quienes ingresan a los predios sin documento alguno con el objetivo de levantar una finca para vivir y luego hacerse de la propiedad mediante el instituto de la prescripción. En otros, los usurpadores están provistos de alguna documentación como las conocidas “cesiones de derechos posesorios” que, entre otras cosas, pueden inscribirse en los registros de la propiedad.
Los predios ocupados presentan en muchas oportunidades adeudos de diversos tributos, tanto municipales como nacionales, lo que es advertido de alguna manera por los potenciales ocupantes.
También ocurre que los verdaderos propietarios se percatan de la situación y denuncian a los ocupantes por el delito de usurpación. Solo en la jurisdicción de los dos juzgados de la ciudad de San Carlos hay más de 100 denuncias por usurpación de predios ubicados en los balnearios de La Barra, Manantiales y José Ignacio, entre otras zonas.
En otros puntos de la zona costera del departamento hay centenares de ocupaciones de predios tanto por la vía directa como mediante el empleo de documentos de dudosa legalidad.
Prófugo
Uno de los escribanos se encuentra prófugo con pedido de captura emitido por varios juzgados, entre ellos por una de las dos sedes judiciales especializadas en corrupción.
Hace un tiempo, el notario fue denunciado por haber facilitado la usurpación de varios terrenos en la zona balnearia de Canelones con la ayuda de un funcionario policial que revistaba como cabo en la Seccional 27 de El Pinar. El efectivo, también prófugo, tuvo la deferencia de devolver el arma de reglamento, entregada por su esposa a la misma repartición policial.
La jueza Adriana Graziuso dispuso en los últimos meses el procesamiento con prisión de cinco personas por la ocupación ilegal de predios. Estas personas fueron asesoradas por el escribano fugado, actualmente en la clandestinidad, a quien la Suprema Corte de Justicia le quitó la habilitación de notario.
Más causas
Graziuso también citó para el 3 de setiembre a una escribana y varias personas por la usurpación de numerosos predios en el balneario El Pinar, del departamento de Canelones. La notaria y varios trabajadores fueron denunciados por la usurpación de varios predios ubicados en la calle Kiyú, del balneario Médanos de Solymar de la Ciudad de la Costa.
El propietario de uno de los predios fue advertido por un vecino, quien le advirtió que un grupo de trabajadores había ingresado a su terreno para talar todos los pinos. La denuncia policial dio lugar a la intervención judicial desde donde se emitió la orden de frenar la tala.
Sin embargo, los trabajadores continuaron con su tarea asegurando que lo hacían en nombre del dueño del predio. El abogado del propietario se contactó con el otro “dueño” del terreno, quien le advirtió que nada tenía que hablar sobre el tema y le recomendó que se contactara con su escribana. La profesional le dijo al abogado denunciante que su cliente contaba con “un documento privado no inscrito”. Luego, la notaria cortó la llamada.
Denunciada
En los últimos meses, en el departamento de Maldonado, una escribana fue denunciada por haber emitido alrededor de 80 cesiones de derechos posesorios. La notaria fue denunciada en la Dirección de Investigaciones de la Jefatura de Maldonado. Las denuncias, según fuentes del caso, fueron elevadas a la Justicia Penal de turno, donde hoy se instruyen los respectivos presumarios. En todas las maniobras también participó su esposo, quien está dedicado a los negocios inmobiliarios.
El mismo problema en la Costa de Oro canaria
En los últimos 10 años fueron ocupados ilegalmente 700 terrenos en los balnearios Neptunia, Pinamar Norte, Salinas y Marindia, según estimaciones de la Alcaldía de Salinas, informadas a El País en noviembre de 2013.
Este municipio constató que los fraccionamientos irregulares en Neptunia Norte replican estrategias aplicadas en otros balnearios. Estos son: loteos clandestinos realizados con las firmas de escribanos mediante la venta de los derechos sucesorios; negocios de predios entre particulares por precios que oscilaron entre $ 10.000 y $ 90.000 y ocupaciones de lotes sin pagar hechas por personas desesperadas por tener un lugar donde levantar una vivienda precaria tras recibir informaciones de familiares o amigos.
También se sospecha de ventas de terrenos realizadas por empresas que adeudan dinero a la Intendencia de Canelones.