Reunión Celac-China: reflexiones

bruniPor el Dr. Jorge R. Bruni

Se reúnen en Pekín, China y la Comunidad Económica Latinoamericana y del Caribe- CELAC, nacida en 12/2011 e integrada por 33 países latinoamericanos, no formando parte de la misma EEUU. ¿Se sublevaron las naciones que tiempo atrás integraban el llamado y menospreciado “patio trasero de los yankis? “Esto era inimaginable decenios atrás cuando el centro del discurso era el anticomunismo contra la URSS, China, Cuba, Vietnam, Corea del Norte y tantos otros.

Futuro complejo sin duda, le espera a nuestro continente. Pero si se actúa política y racionalmente, el porvenir nos puede deparar sorpresas positivas.

¿Qué está pasando? El gigante asiático sigue dando pasos buscando lograr el liderazgo económico mundial. Ello torna explicables los contactos con el mundo en general, y nuestro continente en particular. Obsérvese que la industria china es el primer destino de las exportaciones de Brasil, Perú, Chile, o el segundo para Uruguay, Colombia, Cuba o Venezuela. Por su parte, las exportaciones chinas representan el principal abastecimiento de Brasil y la segunda mitad del resto de la región.

No siendo el objetivo de esta nota, mucho lo que se podría decir acerca de China.

Por ejemplo podríamos referir a lo que significan las redes de transporte, trenes y canales oceánicos- interoceánicos, etc. Es un caso por demás significativo el de Nicaragua- hay otros- , que hace casi dos años otorgó un permiso por 50 años, renovable por otro medio siglo, a la empresa HKND, patrocinadora del Canal de Nicaragua, es decir, del viejo sueño de más de 100 años que ha tenido ese país. Desarrolla proyectos de infraestructura, participa en el diseño, construcción y funcionamiento de un centro de transporte y el canal Interoceánico mencionado. El proyecto que está próximo a su comienzo, superaría al de Panamá, y HKND se ha comprometido con el respeto del medio ambiente. ¿Será así? Años atrás se hablaba de que originaría un millón de puestos de trabajo para los nicaragüenses. Actualmente se dice que serán 25 mil.

Agreguemos la implementación de un canal oceánico entre El Salvador y Guatemala, con financiación que no es china. Lo mismo podría pasar con los canales secos de Colombia y El Salvador, estos sí financiados y operados por el Grupo Ferroviario de China. Obviamente la competencia con Panamá es trascendente, lo que ha llevado al canciller de Panamá a expresar que de seguir así ¡América Central se parecerá a un gruyère!

Pues bien. En la reunión CELAC-CHINA se sentaron las bases y normativas para un plan quinquenal de cooperación en varias áreas: alta tecnología, infraestructura, recursos naturales y energía, finanzas, agricultura, ciencia e intercambios, todo ello resumido en tres aspectos fundamentales: comercio, inversión y cooperación. Se definieron prioridades y medidas. Se realizaría una nueva reunión en 2018 en Chile. Seguir adelante es una meta esencial.

¡Y un detalle por demás elocuente! China levantó al parecer, la barrera de sólo poder tener un hijo. Los 1300 millones de hoy ¿cuántos serían dentro de 20 o 30 años?

¿Y Uruguay y la región? En nota anterior titulada: Integración. Perspectivas Y Desafíos, mencionábamos la multiplicidad de bloques existentes en nuestra región: MERCOSUR, ALIANZA DEL PACÍFICO, ALBA, UNASUR, CELAC, ALADI, etc. No repetiremos lo anterior. Sólo ratificamos la necesidad de visiones complementarias y no necesariamente opuestas entre los mismos. Agregábamos que debían existir visiones e instituciones supranacionales, y que no bastaban las afinidades ideológicas para lograrlo. Hacíamos mención a la gran contradicción entre la teoría y realidad, y que había que actuar con principios pero con pragmatismo.

La realidad nos está mostrando diferencias, fundamentalmente entre la Alianza del Pacífico-MERCOSUR y UNASUR. Paraguay quizás busca otra óptica para su política de integración. Por su parte, Uruguay, creemos que con más visión política, busca que se disminuya la influencia de EEUU, promovedor de tratados bilaterales de comercio, que trata de retomar el viejo espíritu neoliberal comercialista del MERCOSUR de 1991. Recordemos que las economías del Pacífico ya tienen acuerdo de libre comercio con los norteamericanos.

Por su parte Argentina, Brasil y Venezuela, los grandes del MERCOSUR, tienen algunas discrepancias con los dos países más pequeños. Agreguemos la caída de precios del petróleo, los rasgos negativos que muestra la Unión Europea, Rusia y el BRICS, y se comprenderá el panorama.

Por último, no debemos ignorar los avances de la derecha continental. ¿Es la misma que hace 20 años? Hoy se presenta como más “aggiornada”, por tanto ¿más peligrosa?. Habla de democracia, de mantener logros sociales, etc. ¿Será menos neoliberal realmente?

Lo expresado y otros aspectos nos muestran como decíamos, lo complejo que es el futuro para nuestro continente, pero con futuras riquezas de contenidos más que elocuentes. De nosotros depende.