Un sujeto que había sido detenido hace unos días con un arma en su poder fue condenado a pasar casi todo lo que resta del año alojado en Las Rosas. Allí tendrá tiempo de reflexionar sobre la pertinencia de hacerse el vivo cuando existe un Código Penal en vigencia.
El individuo había sido detenido en la tarde del lunes. En principio, la Policía fue alertada sobre una rapiña perpetrada en un almacén ubicado en la calle Francisco Moreno del barrio Maldonado Nuevo.
La denunciante manifestó que dos sujetos portando armas de fuego ingresaron al comercio y mediante amenazas se llevaron la suma de $ 12.000. Poco después, efectivos policiales que realizaban patrullaje por las inmediaciones avistaron a varios sujetos que al ver los móviles policiales salieron corriendo por encima de los techos de las fincas del lugar. Tras una intensa persecución, los agentes lograron detener a uno de ellos, que portaba un arma de fuego. Se trataba de un joven de 22 años, de iniciales R.M.G.V.
Una vez en la dependencia policial se estableció que el arma en cuestión se encontraba requerida desde el mes de enero del año 2014, en que fue hurtada del interior de un vehículo estacionado en la calle Yaro entre Avda. Francia y Lenzina.
Una vez conducido ante la justicia penal, R.M.G.V. fue hallado autor penalmente responsable de un delito de receptación y un delito de porte de arma de fuego en lugares públicos en régimen de reiteración real.
Fue condenado a la pena de 8 meses de prisión efectiva, con descuento de la detención sufrida. Además, deberá indemnizar al Estado los gastos de alimentación, vestido y alojamiento durante su reclusión de conformidad a los artículos 104 al 106 del código de proceso penal.
